Si llevas tiempo empleando Mailchimp tendrás un montón de listas creadas y te resultará incómodo (y caro) gestionarlas todas. La solución es fusionarlas creando campos de segmentación. Aprende cómo.
Si tienes una base de datos de clientes muy básica (que incluye nombre del cliente + email y poco más) y quieres ampliarla este artículo explica cómo hacerlo en 5 pasos.
Los estudios de usabilidad dicen que no hay un color de fondo idóneo para tus emails (sí que lo hay para las webs) sino que el color ideal depende de la imagen que hayas elegido para la cabecera.
Recientemente pusimos en práctica unos consejos de Jacob Nielsen para mejorar la eficacia de nuestros emails y los resultados fueron sorprendentemente positivos. Así que los comparto con vosotros.
Hace unas pocas semanas Mailchimp lanzó un nuevo servicio (de pago) llamado Automation. Este servicio permite crear prácticamente tantos automatismos como te puedas imaginar.
Me encanta una aplicación en la que está trabajando Nacho González Barros (cuánto bien ha hecho este hombre en el online español) llamada https://mailtrack.io y que te ofrece la posibilidad de rastraer qué emails de los que has enviado han sido recibido, cuáles abiertos, etc.
Los últimos meses hemos estado estudiando la composición de los emails que enviamos para saber cuál es la configuración más eficiente. Nos hemos dado cuenta de aspectos que ya intuíamos, como que los emails breves son mucho más eficientes que los largos. Pero sobre todo hemos estudiando dónde clica la gente.
Es peor tener una base de datos enorme sin apenas actividad que mantener una base de datos de emails de menos usuarios, más activos. Para ello, sigue estos cuatro sencillos pasos.
No entiendo la publicidad que no llama a la acción. Si uno quiere vender debe pedirle a sus clientes que le compren, no hay más. Recientemente hicimos una campaña para captar seguidores en la cuenta de Twitter de un cliente. Empezamos retwiteando a aquellos que nos interesaba captar. En un 9% de los casos nos devolvieron el favor siguiéndonos. La misma respuesta obtuvimos al enviar mensajes directos. Luego nos dedicamos a seguir a aquellos que nos interesaban y el 26% respondió siguiéndonos. En una tercera fase pedimos a la gente que nos siguiera directamente: el 39% lo hizo.