El gusto del consumidor no evoluciona en algunas industrias. El helado de vainilla sigue siendo el más vendido, el café con leche el desayuno de todos. No obstante, a todo el mundo le gusta hacer una “excursión” fuera de su rutina diaria y en esas excursiones cambian de tienda habitual. Esa es una oportunidad que debes aprovechar.
Mis padres eran heladeros. El 85% de las ventas de una heladería son horchata, limón granizado y helado de chocolate, nata o vainilla. Eso sí, nosotros cada mes teníamos un producto novedoso -limón granizado con granadina, por ejemplo- que anunciábamos convenientemente y traía gente a la puerta. Sobre todo, gente que no había venido antes. Esas personas, si se sentían bien atendidas volvían luego no a por la novedad, sino a por su horchata, limón granizado o helado de vainilla. Otra cosa que hacían era contarle a todos sus amigos que habían probado un helado súper novedoso. Y claro, luego eran sus amigos los que venían.
En USA Dunkin Donuts siempre tiene su donut del mes; Starbucks, su café creativo, BackYard Burgers tiene su postre de temporada… Lo tienen muy claro.
Los productos nuevos generan ilusión y viralidad, dos ingredientes básicos para que un negocio funcione.